El pasado miércoles 5 de abril, celebramos la Pascua en el colegio, por lo que tuvieron un día un tanto especial.
Divididos en tres equipos, se dispusieron a encontrar cada uno de ellos a su conejito de Pascua, era la primera prueba antes de llegar al lugar donde comenzaría la búsqueda de los huevos.
Debo reconocer, que los encontraron rapidísimo; les suele costar más localizar el bolígrafo dentro del estuche.
Después, se internaron por el camino de al lado del colegio en búsqueda de los ansiados huevos de chocolate. Fue necesaria la utilización de los redeños porque algunos se habían colado entre las ortigas, pero a pesar de esto y de que otros aparecieron aplastados, la recolecta fue todo un éxito, descubriendo que tenemos grandes rastreadores en la clase.





























Una vez de vuelta, hicieron el recuento de huevos por equipos (los dorados valían 5 puntos, los rosas 3 y los azules 1). La verdad es que no les hizo falta pensar mucho, había un grupo que era el claro ganador, así que le dieron un fuerte aplauso y se dispusieron a zamparse a los pobres conejitos de Pascua.
También habían tenido cumpleaños y ya llevaban niveles de azúcar suficiente en el cuerpo, así que repartieron los huevos de manera equitativa entre todos y se los llevaron para casa.
¡UN DÍA ESTUPENDO!









